estados

en principio las imágenes no tendrían mucho que ver la una con la otra, pero me temo que la ventana se me ha metido en la pantalla, que el frío de estos días, la monotonía, se alían con esa parte no tan romántica del oficio de fotógrafo que es retocar, ajustar, revisar, comprobar por enésima vez los detalles
luego los reportajes vuelven del laboratorio radiantes, con brillos de celofan, olor a nuevo,  y ya todo eso se olvida, pero es cierto que hay horas que duran más que días...
y que esto puede ilustrar bien lo que es el proceso, las mil pequeñas historias a veces dispares que acumula una imagen, todo lo que queremos decir también cuando os hablamos de lo personal que sentimos nuestro trabajo, la parte que inevitable lleva de nosotros
en mi ventana sigue el invierno, muchos grises estos días, pero el fin de semana tendrá premio y ya estoy deseando contároslo...